"Nocturno 555" de Alfredo Azcona

Alfredo Azcona produce una ruptura conceptual de su propia obra generando energías compositivas diferentes. Pero el logro de esta compleja ejecución, multiplica su identidad creativa y, en ardua pluralidad del propio yo, desarrolla piezas de impresión digital sobre tela, objetos y pinturas. Inspirado en los testimonios pertenecientes a la XVIII dinastía de la civilización egipcia, donde tuvo lugar el reinado del faraón Tutankhamon, la obra de Azcona revitaliza el sentido de pertenencia que revelo como ninguna aquella cultura. A partir de los ejes formales de antiguas piezas, como La portadora de ofrendas, el artista compone su mirada que actualiza la connotación del pasado y reaviva la entidad de sus fundamentos. Figuras paganas y de ficción – versiones de Pinocchio - revestidas de solemnidad y hieratismo apartan un aire demiúrgico y distante que conducen al clima de permanencia tributado por la obra monumental. Fondos atomizados abren la brecha entre el principio y el fin, entre la formación y la desintegración. Grace Bayala. Curadora.